Monday, February 02, 2009

La carne

Supongo que seguirá durmiendo el muy hijoputa. Lleva todo el día así, sin salir de su cuarto. Le oí llegar a eso de las siete de la mañana. Borracho, seguramente. Lo dejó todo lleno de barro y pisadas. Y eso no es todo. Esta mañana encontré sangre en el lavabo. Seguro que se metió en alguna pelea de borrachos. Le estará bien empleado si le han partido la nariz.
No es la primer vez que lo hace, ¿sabes? El mes pasado hizo lo mismo. Salió de noche y volvió por la madrugada con la ropa rasgada.
A saber a dónde va... A saber qué hace.
Antes no era así. Antes salía a tomar un par de cervezas y volvía pronto, pero ahora... No sé. De acuerdo que sólo lo hace de vez en cuando pero aun así es muy raro. No parece el mismo últimamente. Incluso huele distinto. Desde que le mordió aquel perro, ¿sabes? Desde entonces hace todas estas tonterías. El otro día se comió toda la carne picada que había comprado para hacer albóndigas. Se la comió cruda, ¿te lo puedes creer?

A la memoria de Lux Interior, quien (directamente o indirectamente) ha sido inspiración constante para este blog